UNA PEQUEÑA HISTORIA
Sixto Mogrollo, hasta hace poco era, según él, profesor de la
Universidad Autónoma de León, circunscripción de El Bierzo. Actualmente vive de
dar clases particulares, traducir folletos publicitarios, hacer de negro −sueltos,
solapas de libros, pequeñas críticas al gusto, prólogos,…− y gorronear cafés y
cubatas a los conocidos (los poco conocidos, claro, los muy ya no se dejan). Yo
tuve suerte (¿?) porque, aparte de conversación amena (eso siempre), me ofreció
un par de folios dobladísimos que sacó de la chupa y me metió en la mano,
cerrándola a continuación, mientras miraba hacia otra parte, como si me pasara
unas papelinas.
−Me caes bien. Todo por un cubata −dijo bajando la voz.
−¿Tooo do? −balbuceé sin comprender bien.
−Sí, todo eso, ¡oro molido! −Y con la vista señaló mi die stra
todavía cerrada.
−Bueee no −seguí balbuceando.
−Un cubata sin contar el que me estoy tomando, claro −puntualizó
aprovechando mi gran confusión y desgaste de la guardia.
Con la sensación de que se había cobrado a la vez tres de duples más
tres de treintaiuna, le pedí el otro trago, pagué y marché con mi “oro molido”.
Adjunto os envío el contenido de los folios, después de planchados,
desengrasados y transcritos, como un CUENTO (no es oro molido, pero eso, eso ya
lo sabíamos) que, no sé si os gustará pero, en cualquier caso conlleva los
mejores deseos para el año entrante: ¡FELIZ 2014!
Un abrazo de
Bot i Bolera
CUENTO ANTIGUO (CON
INCIERTO FINAL) DE TODO EL AÑO
PARA EL DÍA DE AÑO
NUEVO DE 2014
−Salve
al nuevo gobernador de Atriusa Septentrionis,
salve –saludó Quintus Pacuvianus Brutus
al recién llegado, al tiempo que le ofrecía una copa de vino.
−Salve, amigo. Y todo
gracias a ti.
−Ven
y siéntate –agregó el anfitrión, al tiempo que cogía una larga vara de avellano
con la que comenzó a dibujar unas líneas en el foso de arena alisada−. Atiende,
dilecto Sextus Sestius Marcius, en
breve, vas a adjudicar las obras del Acueducto Imperial por un importe de
100.000 denarios. El contratista favorecido, a cambio, te entregará 4.000
denarios; pero ese dinero, ¡ojo!, debe viajar a Roma para ser ingresado en las
arcas de la familia-dinastía que preside nuestro augusto emperador y que yo, su
humilde servidor, administro.
−No
comprendo –comentó el gobernador mientras miraba en el foso de arena las marcas
que iba dejando la punta de la vara: un esquemático acueducto, “C”, “IV”−, ¿es normal que el contratista esté
dispuesto a entregar cuatro partes de cien?
−Normalísimo,
es el canon. Él lo adelanta y luego incrementa el costo del acueducto hasta
105.000 denarios –respondió Q.Pacuvianus,mientras en el foso iba apareciendo“CV”.
−Eso
significa que los ciudadanos deben pagar un incremento de 5.000 denarios por
nada.
−Eso
no nos va ni a ti ni a mí. Lo importante es que hemos generado 4.000 denarios para
las necesidades de la fam-dinastía.
−Bien,
si son las normas de la fam-dinastía,
aceptémoslo así, pero, ya que se generan aquí, lo propio es que queden en las
arcas de la fam-dinastía de Atriusa Septentrionis
–manifestó Sex.Sestius muy en su
puesto de gobernador.
−A
ti, como máximo exponente de la fam-dinastía en Atriusa Septentrionis te llegará el correspondiente peculio, pero
déjame a mí que gobierne la pecunia, −respondió, subiendo el tono de la voz, el
romano.
−Eres
sabedor, poderoso Q.Pacuvianus, que
la situación de la fam-dinastía es crítica aquí −alegó con cautela el atriuso,
pero sin recular un palmo en su postura−: necesitamos contratar, como asesores,
a algunos tribunos muy leales, además de sobresueldos para algunos Consiliarii.
−No
querrás comparar tus problemas con los de Roma –espetó Q.Pacuvianus de forma engolada−. Y no olvides que sigo siendo el Magister Officiorum –agregó el romano al
tiempo que tiraba la vara de avellano, hacía una seña a su guardia, recogía el
vuelo de su túnica y marchaba airado del patio de Recuperatione (la casa que ocupaba cuando viajaba a Atriusa Septentrionis) para montar su
blanco corcel y tomar la via Velox
con dirección a Roma.
Nos
hemos creado un potente enemigo –susurró el leal Decimus Antonius Tertius, que, disfrazado de criado, surgió de
detrás de una columna.
−Sí,
lo sé –musitó Sex.Sestius−, no olvido
que es el todopoderoso Magister
Officiorum, controlador de “La Cancillería” y del mando de la Scholae Palatinae, amén de los agentes in rebus, pero no puedo consentir que
él gobierne Atriusa Septentrionis, a
golpe de correo, desde Roma; el gobernador debe estar aquí y ese es mi papel.
***
Addenda: Al cabo de varios años, montando
un caballo zaíno, Q.Pacuvianus, que
ya no era Magister Officiorum, regresó
a Atriusa Septentrionis para acceder
al puesto de gobernador.
***
NOTA:
Sacado del libro “Textos procedentes de pergaminos y manuscritos diversos de la
Hispania Romana. Recopilados, clasificados y traducidos por monjes de la orden
del Míster (IO)”, originario del Monasterio de San Viagato de la Vegona. Después
de muchos borrones y de algún agujero (¿censura?) en el papel, se pudo aventurar,
más que leer, muchas palabras, incluyendo nomina
y cognomina romanos.
_______________________________
Lo dicho, que este 2014 sea un buen año,
al menos que no sea malo.
Para todos.
____________________________________
Las imágenes, por orden, proceden de
•
|
HOPPER (marcelocaballero-fotografia.blogspot.com.es)
|
•
|
RAMÓN MOSCARDÓ (tripadvisor.es)
|
•
|
MANUEL MARTÍN MORGADO (fondonegro1.blogspot.com.es)
|
•
|
papelinas (www.que.es)
|
•
|
Romanos (www.derechoromano.es)
|
•
|
Viaducto Segovia (es.wikipedia.org)
|
•
|
Mapa hispania (e-ducativa.catedu.es)
|
•
|
Romano a caballo (tallerdebelenismo.forocreacion.com)
|
•
|
Idem
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario