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domingo, 1 de enero de 2012

EL AÑO SE MUERE, ¡VIVA EL AÑO! (qué remedio…)

I.-Breve recordatorio del año 2011





31.diciembre.2011


Estamos pasando las últimas hojas del “taco” -¡vaya año!- y, realmente, resulta variado, pesado, difícil y jodido; inmerso en una atmósfera espesa, ácida y hostil; vamos, un pequeño infierno:

•    ETA aparca las armas… pero no las entrega


•    Una melodía, desencadenada por varios países musulmanes del Mediterráneo, nos alegra la primavera hasta que al esperanzador derrocamiento de los dictadores le sigue una caravana de interrogantes (ojalá no coincidan con los de Irán o Irak)

•    Irak, país que dejan los americanos que nunca debieron haber invadido

•    Americanos, soldados que, diez años después, vengan la mortandad de las “torres gemelas” matando a Bin Laden y cerrando un capítulo del terrorismo de Al Qaeda

•    Sólo un capítulo: “Frankestein mata al monstruo pero no a su descendencia”


•    La madre Naturaleza nos sigue recordando nuestra condición de seres frágiles: por su fuerza y repercusión recordamos Japón, por su proximidad Lorca (y El Hierro… temblando)
 
•    Un soplo de aire fresco nos llegó en primavera con los “indignados” del 15M. ¡Lástima el remate a gol! Siempre nos queda la esperanza de que la esencia impregne a la sociedad más tarde, como ocurrió con “mayo del 68”

•    En mayo hubo cambio de color en la geografía española –notable incremento de gaviotas azules y marchitez generalizada de rosas rojas- refrendado el 20N por una mayoría de votantes (defraudados unos, ilusionados otros, cansados y aburridos los más); aparece una esperanza, natural o forzada, trufada de dudas y resignación


•    Aun sabiendo que la ética no es la misma para todos [hay una ética para la mayoría de los mortales y otra(s) para ciertos colectivos o individuos poseedores de bula celestial](*), todavía nos sorprende la actitud cínica y desafiante frente a la sociedad de Rupert Murdoch, Dominique Strauss-Kahn o Silvio Berlusconi (por citar algunos internacionales)

•    De los políticos mejor no hablar (son de los que tienen bula), “prometer, prometer…”

•    Y todas estas setas han eclosionado en un ambiente social verdaderamente jodido: economía por los suelos, el euro como diana de francotiradores, el futuro oscuro (tirando a negro) y, lo que es peor, un paro de acojonar.

Parece que estemos bajando por la espiral del infierno… y sin guía.


 II.-Reflexiones y deseos con el cambio de año
 
01.enero.2012
 

El euro cumple 10 años de edad. Cuando nació, toda la inquietud –bastante obsesiva- residía en explicarnos que el “redondeo” –nuestro temor(¿?)- no iba a ser un problema. Bueno, entonces un café costaba unas 100/120 pesetas, ahora, al cambio, unas 200 pesetas. La moneda común ha ocasionado la disminución de los riesgos del tipo de cambio, la eliminación de los costes asociados a las transacciones bancarias entre divisas y una mayor flexibilidad y liquidez en los mercados financieros. Al mismo tiempo, en España el IPC general, en estos diez años, ha subido un 34%, los alimentos un 48%, los sueldos… bastante menos.

El euro cumple 10 años de edad y está inmerso en una adolescencia precoz realmente terrible; objetivo de todas las miradas malintencionadas, no deja de crear problemas –directa o indirectamente- a todos los países que lo tienen como moneda oficial. ¡Vaya cisco!

La economía de los países europeos anda enferma; la epidemia ha afectado primero, como siempre, a los más débiles –el Mediterráneo se contamina fácil-, pero no se libra ninguno. La situación, lejos de escapar de la crisis, se hunde cada vez más en ella -o en otra de cepa más virulenta- y parece que descendamos por la espiral del mismísimo infierno de Dante.

    Deseo que la curva descendente tenga un mínimo y que lo veamos pronto.
    Deseo que, en cualquier caso, tampoco hace falta bajar hasta el noveno círculo.
    Deseo que Virgilio, bajo cualquier forma, nos refresque el ambiente con brisa 15M y nos guíe con celeridad hacia fuera.
    Deseo, os deseo a todos, ¡Feliz Año 2012!
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(*) Otro día hablaremos de la ética de ciertos colectivos, políticos por ejemplo, algunos sectores empresariales,...